domingo, 15 de diciembre de 2013

Tú mi Poema.


Te he amado como nunca pensé,
a mi llegaste de forma sigilosa,
apoderándote de mis sueños,
 poco a poco como el cielo,
silencioso, te adueñaste de mi, de todo
los más puro  y hermoso.

¡ Mis ilusiones, mi sentir,
mis ojos, ya solo por los tuyos veían,
ya solo en tus palabras creían!
bajos tu dominio,” solo bajo el
deje de ser yo”, para ser contigo.

 Como una sombra llegaste,
donde la luz solo es como una leve caricia
me acercaste al cielo, pero solo fue un verso
dormido, entre sueños dulces y amargos

¡Como la aurora difusa, el mar agitado
el viento que iracundo golpea, en el vano intento,
de romper tu impasividad, ese hielo, esas sombras
y así, acercar tu corazón a la tibieza
que tuviesen mucho de nubes blancas y poco de dureza!

Ya solo puedo decir.
¡Te he amado más allá del amor que
 que se conoce, hasta el límite de mi
existencia
te hice eternidad más allá de los sueños

Y con puro amor
viéndote con los ojos del alma, desperté el verso
para convertirte en …mi poema!


Mª José Ferrer González
.® Reservado todos los derechos de su autor

lunes, 9 de diciembre de 2013

El Poeta.


Como estrella rutilante, que  a la luna acompaña.

Como nómada que en la noche oscura,
por el desierto cabalga.


Como el amanecer,  busca la luz pérdida,
Iluminando con timidez, breves rincones,
del alma
 el sol tibio, acompañado de la brisa se insinúa,
despidiendo el alba.

¡Bajo el fulgor de las antorchas, sueña,
encontrar la verdad! ¿No la del filósofo,
no, la experiencias de otros entes, vividas?

¡Con las alas, extenuadas, abatidas, en la arena yace,
remolino de dudas, laceran su interior,
como, mar embravecido, rompe contra su boca
ese dolor, busca con sumisión, la serena conclusión,
que le devuelva luz a su vida!

¡Ay!  El poeta elevo su voz, nadie comprendió,
el debatir de su alma, se quedo en algún lugar,
de la existencia humana, ya solo busca la luz de la luna,
su siempre, fiel, secreta y amada…aliada.

Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor.



martes, 3 de diciembre de 2013

El alma soñó.

Esta noche a solas el alma sueña, el cuerpo lejos queda
callado, duramente ve, como lo reclama la tierra,
ocaso sin nombre, cielo y luna, donde una vez, unas alas
se quebraron, por intentar coger una estrella, las palabras
son las alas, son la vida, el corazón del poeta, las nubes, recogen
su lamento y su pesar, por esas alas que no volverán…

¡Voces se oyen, entre el mar y el cielo, enfadadas miran al horizonte,
esperando leer los versos, prosas y letras, volver a ver las alas del poeta!
La luna se esconde, la noche se vuelve oscura, ya no brillan las estrellas,
Y el poeta se pregunta ¿quedara en el recuerdo, alguno de mis poemas?

En ellos, quiso y dio, lo que su alma sentía, el amor de lo sagrado, con un afán incierto, hizo suya la luna y el cielo, con los ojos heridos, quiso coger una estrella, para adorarla.
El poeta conoce, ama, sufre, llora y peca, porque tiene alma.
La luna quiere, que despierte y esa adorada estrella, un beso deposita en sus labios, con tranquila calma.
Quizás para que siga haciendo versos o porque no quedan, palabras
ya, tan solo contempla con lagrimas sencillas,
una rosa negra, sobre su escrito y la blanca arena…


Mª José Ferrer González.
® Reservado copyright.

jueves, 28 de noviembre de 2013

Corazones vacíos.


Madrugada  que acongojas mi corazón,
con sueños que ya no son, pararlos quisiera,
que terminase está desazón, que el descanso perturba,
hiela la risa, mata y decepciona, con su cruel realidad,
y mi alma lacera con inmenso dolor.

Si pruebas de la vida son, con seguridad que la talla he dado,
con coraje y valor, he seguido.

La razón de mi mente consecuente es, pero no así mi corazón,
¡Tonto y necio! Y me digo: ¿Si por otro pudiese cambiarlo?
Nacer de nuevo, deseo vano, conservando la memoria, para,
no olvidar los desmanes de los corazones vacíos, que tanto dolor, infringen,  ir espantado de mí camino, sin iras, ni rencor, semejantes, desatinos, que en mi rostro brille la sonrisa de nuevo y en mis sueños el sosiego, los despertares de las mañanas alegres y tranquilas.

¡Yo te entrego, yo te doy, un corazón lleno, todo lo que tengo y soy,
como amiga, como amor y como persona, nada pido, nada exijo,
¿Por qué darme a cambio corazones vacíos?
…no me deis castigo.


sábado, 23 de noviembre de 2013

Viento de sentimientos.


Como el viento furioso, a la deriva voy,
las sombras de la noche, por compañía,
eterna fugitiva de mi misma, del pasado,
 del presente, de la misma vida,
observo el azul  donde convergen,
los sueños muertos y las ilusiones,
como frágiles cristales rotos se esparcen,
descuartizando impíamente la piel del alma.

Me hallo entre los escombros que inician,
un viaje sin fin al infinito.

Y en esta absurda búsqueda, el viento se presenta,
como enemigo, y en el camino observo jirones de sentimientos,
que nada tienen que ver con los míos.
Son el reflejo que me hacen recordar, que soy mortal,
imperfecta como tal, y que en esos sentimientos,
que duda cabe que hay retazos… de los míos.

Carmen Marina Santana Y
Mª José Ferrer González

.® Reservado todos los derechos de su autor.

sábado, 9 de noviembre de 2013

Mi caballo blanco.


Sueños inquietos  me llevan a amaneceres tempraneros, alazanes negros que recuerdan el  pasado y el presente del futuro incierto
Y en la noche oscura escribiendo, sigo quitándole tiempo al tiempo mi corazón le dicta sin prisas a mis dedos, y yo aprendiz de poemas y versos intento plasmar con cautela, porque solo así viva me siento.

Recuerdo  mi niñez, los brazos protectores de mis padres espantando mis miedos, las inquietudes de mis sueños, con sus cantos me devolvían al placido descanso, calma quieta, voz callada, solo sus brazos y el canto de una nana, cual princesa en mi caballo blanco galopaba, soñando alcanzar la luna que tanto me gustaba.

¡Hace tanto tiempo que se fueron y sin embargo aun siento sus abrazos! aunque ya no me retornen al placido descanso, ni sea esa princesa, ni oiga sus cantos, y la luna mi aliada, como si el tiempo no hubiese pasado.
Las asignaturas de la vida, los miedos y los quebrantos, sola he ido aprendiendo, como pude los fui espantando, no sin sufrimientos y llantos, sin abrazos protectores ni caballos blancos-

¡Hoy toca librar otra batalla, las inquietud y la incógnita me acompañan! quitándole tiempo al tiempo casi estoy en la antesala, con la armadura que todo lo pasado me regalo, pero yo sé que solo por fuera luce y que en verdad no sirve de nada, solo el cariño y el amor ganan a lo desconocido, no existen guerras ganadas a la vida, con armaduras inventadas.

La fe, el cariño de la amistad, del amor, y mis recuerdos me acompañan ¡buen ejército aunque estén en la retaguardia!

¡Ya amanece, los alazanes negros de mis inquietudes dan paso a la princesa que con los abrazos de sus padres en su caballo blanco galopaba! sin miedos, preparada, ya tan solo habla el viento de la mañana y en la lejanía una…nana.


Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor

domingo, 27 de octubre de 2013

Diosa de barro


La mañana envuelve el arrecife de tu cuerpo,
ya el roció salpica tu rostro, con sus primeras gotas.
Se diría que eres una diosa, ciega tu alma, ciego tu corazón,
¡Tan bella! más la luz del día aleja esa ceguera,
la realidad se aposenta para decir que eres una triste mortal,
qué jugo a ser diosa, que busco el aplauso, la atención, la alabanza.

Cerré mis ojos para estar en tus sueños, para orar a tu cuerpo,
allí donde todo lo puedo, pero tú, ávida de clamor, te apoderaste,
de ellos, destrozando lo más puro, lo más sublime, me invitaste,
a soñarte, a amarte, para después negarme, y así , encumbrarte,
en un pedestal que, con tus engaños de diosa creaste.

Ya abrí mis ojos, sin sueños, sin amor, tú los destrozastes.
Aun así, ¿cómo hacer para no adorarte?,
Diosa de barro que ciega tú alma, que ciego tu corazón.
Esfinge y sueño, realidad latente, donde el amor más puro,
ascenderá a ser estrella, luna, cielo, corazón y alma
Tan solo para…amarte.


Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor

viernes, 25 de octubre de 2013

Claro de luna.


  


He besado en secreto, unos labios como fuego,
y acariciado una piel, suave como el terciopelo,
me han mirado unos ojos, totalmente enamorados,
ganando en cada acción, un poco del universo,
para seguir contemplando la luna, cada noche.

En un destello de luz y vida que arrebatamos a la muerte,
las estrellas con mis manos he tocado, mientras la suave música,
de un “ Claro de luna” a soñar me ha invitado, arrastrando mis pasos a ella me he entregado en las horas más profundas de la noche y así,
el alba ha llegado, rompiendo la magia, con la realidad terrenal, fría y helada, donde la razón se impone.
De mi sueños con lagrimas en las mejillas he despertado, aguardando de nuevo las horas más profundas de la noche, para encontrar de nuevo ese destello de luz y de vida, burlándome de la muerte ¡Ya no es lo mismo! ya mis sueños se realizaron,  arrancare jirones de vida para morir, besando, morir amando con el alba aprisionada en las manos.
¡No en vano en secreto unos labios como fuego he besado y  unos ojos,
me han mirado, totalmente… enamorados ¡

Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor. 

lunes, 21 de octubre de 2013

Pasión.



¡Quiero oír los quejidos de tu voz,
al unísono de las caricias de mis dedos,
que cuando sientas mi PASIÓN, TU DESEO, MI DESEO, me envuelvan en tus te quieros ¡

contemplar tu cara de placer, mientras muerdo tu boca
y que mi lengua recorra tu cuerpo, mientras mis manos,

acarician tus senos y mis brazos te rodean en un abrazo,
eterno.

Quiero desnudarte, despacio, mientras acaricio tu pelo,
sentir como vibras, con cada caricia, en cada palabra
en cada gesto.

¡Amor siente mi cuerpo, que unido al tuyo colma,
Nuestro anhelo.
Y así despacio, poco a poco alcanzar el cielo,
Que las estrellas al ver nuestro amor sientan,
Celos!

Y así nos llegue el amanecer con nuestros cuerpos sudorosos, agitados y satisfechos,
Tu deseo, mi deseo, exaltación, locura o delirio,
Que más da los ajedtivos, es la culminación,
De un inmenso amor, que nos lleva a realizarnos, para,
fundirnos en un solo cuerpo.
Tan solo es…
¡LA PASIÓN DEL AMOR…SATISFECHO!

Mª José Ferrer González.

® Reservado todos los derechos de su autor.

jueves, 17 de octubre de 2013

Reflexión.


Y… en el campo, en las montañas donde reina la paz y el silencio,
roto en ocasiones, por el trinar de los pájaros y en las noches el cantar de los grillos.

Desde la naturaleza sabia y amorosa, que hace olvidar el trasiego,
de las ciudades, el griterío, las prisas y el estrés, que lo único que nos aporta día a día , es el desgaste de una vida, intransigente y penosa, con la visión del asfalto, coches y noticias, una jungla, donde el cometido es sobrevivir.

En la montaña, una casita acogedora, sin cotilleos, sin maldades ni especulaciones, donde el cielo parece más cerca, las estrellas más brillantes, el rumor de un rio cristalino, parece que la luna te acunase, mientras el cantar de los grillos una nana de esperanza cantasen.

Al amanecer, el verdor de los arboles con sus ramas te saludan y las flores lanzan su aroma, impregnadas de alegría y cariño, llenando los pulmones de limpio aire.
Pensar, tan solo en lo que la naturaleza te ofrece, te regala, esa paz que enardece.

Las ganas de no volver, nunca más a ese otro mundo, el que se denomina civilizado, al pensamiento te viene ¡Ay! “ Civilizado” si, así fuese, no se sentiría lo que en los campos y montañas se siente, la libertad, cual águila, pero sin alas, la paz y la serenidad te envuelve, la calma quieta y callada, ese florecer a tanta belleza, que abstrae de la realidad, de ese mundo, donde el afán de poder, crece y crece.

Y es entonces, cuando, un pensamiento de pena encoje el corazón,
a los campos y montañas también llega la mano de ese otro mundo “civilizado” que con maldad, talan y queman, sin más fin que la especulación, el interés, sin compasión es el otro mundo, el que no se para ante nada, sin tener en cuenta, que terminan con lo que fue el principio de lo que hoy llamamos “civilización” acaban con el oxigeno puro, libertad y belleza.

 ¡Cuanta falta nos hace y nos hará!
¡Respetarlo, no lo matéis, ni el sueño, ni la paz, ni tanto como nos da!
Dejar que cante el ruiseñor, que por la mano de nuestro mundo,
“Civilizado” no tenga que dejar de cantar…jamás.


Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor.

sábado, 12 de octubre de 2013

Frente al mar


Hoy sentada frente al mar, admirando su majestuosidad
tu recuerdo invadió mis pensamientos y con ellos,
esos proyecto, con los que soñábamos
esas ilusiones, que veíamos reales.

Tanto, que hablando de ellas, creamos ese mundo,
donde, sin saber porque nuestros corazones, al unísono,
latían, con ese deseo siempre presente.

¡Ay! Esos besos tuyos que hasta mi no llegaron,
¿ tan solo los soñamos?... No!

Aferro contra mi pecho tu rostro inocente,
esos párvulos labios, esos ojos, tu risa infantil,
que son ahora tan ajenos, a este dolor, que germina,
en mis entrañas, por no tenerte.

¡Si tu amor fuese mío, la majestuosidad de este mar,
quedaría inerte ante la felicidad de tenerte!

Te amo y te amare mientras tenga vida, mientras,
tenga…mente


Mª José Ferrer González.
® Reservado copyright.

viernes, 11 de octubre de 2013

¿Porque te Quiero?


¡Te quiero, si te quiero!
con el corazón, con lo sentidos,
con mis versos.

Por ello te regalo mis besos,
mis ilusiones y mis sueños.
Contigo, me fundiría en puro fuego.

¿Y porque te quiero?

Las cosas del querer,
no tienen, ni razones, ni consuelo,
ni credo, ni raza, ni sexo.

Pero te quiero, por eso te invito,
ha coger una estrella, ha tocar el cielo,
coje mi mano y no tengas miedo.

Piensa solo que te quiero, más allá,
de la dudas y los complejos.

Te quiero si, te quiero.
¡Contigo mi vida, para siempre,
no hay mujer más bella ni deseada,
por mi corazón, por mi cuerpo!

¡Ay! Te quiero si, te quiero.
aunque la vida se acabe y se borre… el cielo!



Mª José Ferrer González.
® Reservado todos los derechos de su autor.

domingo, 6 de octubre de 2013

La obra de la vida…



Si pudiera retener los besos que di y me dieron,
los abrazos eternos, las caricias tiernas, amorosas y complacientes,
las promesas incumplidas de esos amores hasta la muerte,
como el mar eterno, las estrellas y el cielo o el bosque de los cuentos,
como un acto de amor imposible.

¡Si pudiera retenerlo,
la obra seguiría y eternamente estaría en mis recuerdos!
Pero fueron los actos de una función que se va acabando,
como el viento iracundo que todo lo arrasa.

En la noche callada. solo los sueños retienen
Y el alma enardecida, revive las quimeras, de las promesas incumplidas,
 besos y caricias,
que al llegar la mañana se desvanecen,
dejándome en los labios un regusto amargo
y un profundo dolor en el alma ¡la que nunca muere!

Solo es un acto más de la comedia de la vida,
no abra aplausos, en esta obra no procede.

En la pausa del entre acto, todo lo vivido, se desvanece.
¡Ay! Si retenerlo…pudiese.


Mª José Ferrer González.
® Reservado copyright.

viernes, 4 de octubre de 2013

EL ALMA SOÑÓ


Esta noche a solas el alma sueña, el cuerpo lejos queda
callado duramente ve, cómo lo reclama la tierra.

Ocaso sin nombre, cielo y luna, donde una vez unas alas,
se quebraron por intentar coger una estrella. Las palabras
son las alas, son la vida, el corazón del poeta. Las nubes recogen
su lamento y su pesar, por esas alas que no volverán…

¡Voces se oyen entre el mar y el cielo, enfadadas, miran al horizonte,
esperando leer los versos, prosas y letras, volver a ver las alas del poeta!
La luna se esconde, la noche se vuelve oscura, ya no brillan las estrellas,
Y el poeta se pregunta ¿Quedará en el recuerdo, alguno de mis poemas?

En ellos quiso y dio lo que su alma sentía, el amor de lo sagrado. Con un afán 
incierto hizo suya la luna y el cielo. Con los ojos heridos quiso coger una estrella
para adorarla.

El poeta conoce, ama, sufre, llora y peca porque tiene alma.
Las luna quiere que despierte y esa adorada estrella un beso deposita en sus labios
con tranquila calma.

Quizás para que siga haciendo versos o porque no quedan palabras.
Ya tan sólo contempla con lágrimas sencillas
una rosa negra, sobre su escrito y la blanca arena…


Mª José Ferrer González.
® Reservado copyright.